¿Quieres ahorrar al comprar equipos de imagenología? – Parte 2
Bien, en la parte 2 de este interesantísimo tema, terminaremos de darte parte del contexto que fue abordado en la parte anterior y se compartirán el resto de los puntos en concreto que las personas compradoras podrían considerar para ahorrar estratégicamente, con la finalidad de qué al terminar de leer este artículo, tengas la oportunidad de ponerlos sobre la balanza y valorar a criterio tuyo, que tan prácticos y efectivos podrían ser para tu caso en particular.
Dicho lo anterior, quiero hablarte de algunos “tipos de proveedores”:
- Representantes de venta oficiales de las empresas fabricantes.
- Distribuidores comerciales oficiales de los equipos de los fabricantes.
- Revendedores no oficiales.
En primera instancia, el sentido común podría indicarnos que tratar directamente con los representantes de venta oficiales de las empresas fabricantes y/o bien, con los distribuidores comerciales oficiales de los equipos de los fabricantes, sería más seguro y sensato.
La adquisición de un equipo de imagenología representa una inversión importante y para el caso de aquellos que son fijos, los fabricantes de los mismos crean “guías mecánicas” correspondientes y en resumen, la sala en la que estará el equipo de imagenología, debe alinearse a lo establecido en la guía mecánica del fabricante de tal equipo.
Por si tenías la duda, una guía mecánica deberá indicar de manera precisa, la ubicación de mobiliario, accesorios y para este caso, del equipo de imagenología en la sala correspondiente, es decir, hablamos de un plano que es fundamental para la correcta planificación y diseño de espacios, por ende, el equipo que adquieras y la empresa que lo fabrica, serán determinantes para conocer y entender los requisitos que deben ser cubiertos correcta y particularmente, en relación a la sala en la que se encontrará tu equipo. Podrías consultar al respecto de algunos de estos requisitos en la NOM-229-SSA1-2002.
Dicho esto, y considerando a aquellas personas que no conozcan o bien, no hayan visto antes alguna guía mecánica, compartimos un “ejemplo ilustrativo ultra elemental” de una de estas, que si bien, no incluye medidas, ni el posicionamiento del mobiliario y accesorios correspondientes, ni otros aspectos relevantes (con los que SI DEBE contar una guía mecánica en forma), tal ejemplo pretende ayudarte a conocer o mejor dicho, a darte una idea inicial y elemental de cómo es o cómo se ve una guía mecánica.

Evidentemente que cuándo adquieras tu equipo de imagenología y puedas ver la guía mecánica correspondiente en forma, te darás cuenta porqué le llamamos al anterior, “ejemplo ilustrativo ultra elemental”, pero bueno…
Esperamos que el ejemplo anterior de verdad te ayude a familiarizarte con este tipo de recursos, en caso de no hubieses visto uno antes o bien, si antes de realizar la mención en este artículo, no sabías de la existencia de las guías mecánicas.
Bien, ahora consideremos que en algunas ocasiones, una sala de rayos X:
a. Podría ser “diseñada, construida y acondicionada desde cero”, específicamente en función de la adquisición de un equipo en particular o bien;
b. Pudo haber sido diseñada y construida con anterioridad, no obstante, tal sala deberá reacondicionarse, siendo que en la misma, previamente se encontraba otro equipo que será desinstalado y en su lugar será instalada una nueva adquisición.
Y para ambas situaciones, será necesario contar con la guía mecánica correspondiente.
Toma en consideración que algunos equipos de imagenología podrían implicar más o menos requerimientos que otros y que la guía mecánica correspondiente, según entiendo al momento de la publicación de este artículo, se le entrega al comprador después de realizar la adquisición del equipo o equipos en cuestión, por lo tanto, podrías intentar asesorarte y/u obtener orientación de la mejor forma que puedas con el proveedor y/o directamente con el fabricante al que le realizarías la compra, sobre los requerimientos que debería cumplir la sala, en relación de los equipos que te interese comprar (cuánto menos los principales requerimientos), de ser viable, antes de realizar tales adquisiciones (aunque no te brinden la guía mecánica como tal).
Y de ser viable lo anterior, en algunas ocasiones después de haber analizado de la manera más objetiva posible, los requerimientos que debe cumplir la sala, en relación de los equipos que te interesen, aunque puedas tener “un favorito”, valdría la pena considerar uno distinto si, los costos de las adecuaciones y/o reacondicionamiento de la sala y/o bien, la estimación más objetiva posible que puedas formular de los mismos, se sale de tu presupuesto, eso sí, teniendo siempre presente, que el equipo que elijas debe cumplir con lo dispuesto por la legislación y normatividad aplicable y vigente.
Si lo apreciamos de cierta manera, lo anterior podría brindar la oportunidad a la persona compradora, en algunos casos y evidentemente no con todos los proveedores y/o proveedores potenciales, de generar una relación de confianza con algunos de estos, misma relación que podría ser benéfica para ambas partes y que quizás les sea conveniente preservar y mantener con el pasar del tiempo.
Al generar una relación de confianza con un buen proveedor, este podría orientarte para qué en función de tus condiciones, limitaciones y/o circunstancias particulares como comprador, pudieras elegir de entre los modelos disponibles de equipos de imagenología, la o las opciones que sean convenientes para ti (según sea tu caso).
Y a manera de reflexión para finalizar con el tema de los “tipos de proveedores”, si bien es cierto que debemos generar relaciones de confianza con “buenos proveedores”, también deberíamos hacer lo que nos corresponde para ser “buenos clientes”.
En relación a lo anterior, hablemos de la importancia de que la persona compradora sea plenamente consciente de las condiciones, limitaciones y/o circunstancias particulares a las que está sujeta, en relación a la adquisición de un equipo de imagenología y/o bien, el “rol” que tiene al respecto, por ejemplo…
Los “médicos radiólogos” son por antonomasia quiénes pueden asumir el rol y/o figura de responsable ante las autoridades sanitarias en México, para el caso de los establecimientos que operan con rayos X, por tanto y para fines prácticos de este artículo, podríamos considerar a aquellos de estos profesionales que sean dueñas o dueños de un consultorio, como un “perfil de comprador”, mismo que podría tomar decisiones de compra sin requerir de la autorización de alguien del personal de su consultorio, aunque esto conlleve a grandes responsabilidades que ante las autoridades sanitarias, asumiría directa y particularmente la o el médico radiólogo en cuestión.
Por otra parte, un integrante del personal del departamento de compras de un hospital, podría ser otro “perfil de comprador” y para el caso, a diferencia de lo que ocurre con el “perfil anterior”, esta persona no tendría que lidiar directamente con las requisiciones de la autoridad sanitaria, puesto que en tal hospital, habría uno o más responsables que serían el/los rostros frente a la misma, además de qué, al tratarse de hospitales con “Sistemas de Gestión de Calidad” y por tanto con proceso(s) de compra establecido(s) y más riguroso(s), el personal del departamento de compras deberá guiarse por y cumplir con las directrices de tal proceso, requiriendo por tanto, de la autorización de una o más personas para que se realice la adquisición correspondiente, ejemplo de la jefa o jefe del departamento de compras.
En adición a lo anterior, considera que si el hospital ya tiene una relación formal, estable y con cierta antigüedad con un proveedor y/o fabricante en particular de equipos de imagenología, la labor de la o el integrante del departamento de compras podría ser menor en lo relacionado con la prospección y/o negociación con proveedores y/o proveedores potenciales y podría limitarse (en algunos casos) a seguir un proceso previamente establecido para el hospital para interactuar con tal proveedor y/o fabricante, mismo que dada la relación existente entre ambas partes, podría resolverle de alguna manera y en cierta medida, aspectos relacionados con el acondicionamiento de la sala en la que se encontrará el equipo que adquiera el hospital, por ejemplo.
No obstante, de no contar previamente con una relación como la que mencioné en el párrafo anterior, a la o el integrante del departamento de compras podría asignársele la labor o labores correspondientes de prospección de y/o negociación con proveedores y/o proveedores potenciales (cuánto menos hasta cierto punto y en cierta medida) así como realizar los esfuerzos pertinentes para informarse y cultivarse en temas relevantes relacionados y/o inherentes a las compras / adquisiciones de equipos de imagenología o bien, podría recopilar la información requerida para presentarle el fruto de su trabajo a su jefa o jefe, facilitando así las decisiones de compra de manera estratégica y evidentemente de manera favorable para el hospital, según sea el caso.
Dicho lo anterior, considero que si se aprecia desde cierta perspectiva, este perfil de comprador, tiene mucho más fácil la tarea de asesorarse con las personas adecuadas (quiénes podrían formar parte del personal del mismo hospital), a diferencia de lo que ocurre, por ejemplo, con un médico radiólogo independiente (por así llamarle), qué de no tener las conexiones y/o contactos previamente, tendría que salir a buscarlos y tratar de generar relaciones de confianza con las personas correctas, desde cero y asumiendo riesgos que la o el integrante del personal del departamento de compras de un hospital no tendría que asumir directa y/o completamente por si misma(o).
De hecho, consideramos que si la o el integrante del departamento de compras de un hospital, de ser viable, reúne a las o los jefes de los departamentos pertinentes para tomar las decisiones de compra correspondientes, en conjunto con el proveedor y/o alguno de los representantes oficiales del fabricante, para plantear cuestionamientos, resolver dudas y/o meramente para negociar, el proceso de comunicación entre las partes podría ser más fluido y por tanto, favorable para todos los involucrados.
Como podemos empezar a apreciar con los dos breves ejemplos anteriores, “cada perfil de comprador” tendrá su propio rol y condiciones, limitaciones y/o circunstancias particulares en relación a la adquisición de un equipo de imagenología y una vez entienda las responsabilidades y/u obligaciones que todo ello implica, será mucho más sencillo saber a qué tipo de profesionales solicitarles orientación, acompañamiento y/o bien la prestación de sus servicios, por ejemplo…
Hasta dónde tengo entendido, en algunos casos, los Asesores Especializados en Seguridad Radiológica (AESR), más que realizar la memoria analítica de cálculo de blindajes y el levantamiento de niveles de radiación (requisitos documentales cuyo cumplimiento es FUNDAMENTAL para los establecimientos que operan con rayos X en México), se vuelven uno de los aliados más importantes de algunos médicos radiólogos, siendo que los orientan, apoyan y/o bien, les podrían prestar más servicios para realizar otros trámites frente a la autoridad sanitaria en México (por ejemplo, en la modificación de la licencia sanitaria del establecimiento frente a la autoridad correspondiente, cuando el “ROF” adquiere un nuevo equipo de imagenología para su consultorio, así como la devolución de la licencia sanitaria anterior, según entiendo), además de orientar y/o apoyar a los médicos radiólogos para el cumplimiento de sus responsabilidades y/u obligaciones en su calidad y/o rol de “ROF”, llegando al punto de que en ciertos momentos, pueden volverse casi “su mano derecha” (por así decirlo).
Si quieres saber más sobre los distintos documentos, formatos, conceptos y/o definiciones relevantes relacionados con la NOM-229-SSA1-2002 y con la COFEPRIS, podrías buscar y consultar dentro de su canal oficial en YouTube, videos de la iniciativa EducaPRiS.
Dicho todo lo anterior y antes de plantearte los puntos en concreto que las personas compradoras podrían considerar para ahorrar estratégicamente, quiero mencionarte un aspecto más en el que deberías prestar:
ATENCIÓN...
Considera que es posible que en algunos casos, pudieran adquirirse compromisos de confidencialidad en función del proceso de compra correspondiente y/o de las cotizaciones que estaría recibiendo la persona compradora por parte de quién le vendería el equipo.
Por tanto y de ser el caso de adquirir algún compromiso de confidencialidad al respecto y/o antes de adquirir alguno (de preferencia antes de ello), considero prudente que trates de entender por tu cuenta y de la mejor manera posible, aquello que implican este tipo de compromisos y asimismo, que trates de asesorarte legalmente de manera oportuna con profesionales confiables debidamente capacitados, calificados y especializados en contratos y/o convenios de y/o relacionados con compras médicas (particularmente de equipos de imagenología, de ser posible), para conocer qué sí y que no puedes compartir y externar con terceros, antes de hacerlo de cualquier manera (por ejemplo, con un “técnico radiólogo externo”, por así decirlo).
Para el caso de la adquisición de un equipo de imagenología para un hospital, los responsables de realizar la compra, podrían asesorarse y/o apoyarse en el departamento legal del mismo hospital y para el caso de un médico radiólogo con su propio consultorio, bueno, tendría que buscar por su cuenta a aquellos profesionales que puedan asesorarle y/o brindarle el acompañamiento correspondiente de manera oportuna y efectiva.
Bien, ahora vamos a los puntos en concreto que las personas compradoras podrían considerar para ahorrar estratégicamente, empezando con el mencionado en la parte 1 de este tema:
1. Evita errores en trámites que deriven en nuevos pagos de derechos.
Realizar los trámites requeridos ante la autoridad sanitaria correspondiente de manera correcta, evitando errores que impliquen realizar de nuevo el o los trámites y por tanto, realizar nuevos pagos de derechos, es una gran manera de ahorrar, aunque de buenas a primeras pudieras no verlo como la gran cosa.
Considera que para el caso de los trámites realizados ante COFEPRIS, algunos errores y/o imprecisiones al realizar los mismos, no necesariamente implican una negativa, sino una “prevención” y ante esto, las personas interesadas, podrían realizar las acciones y/o correcciones requeridas para concluir satisfactoriamente el o los trámites ante la autoridad sanitaria.
Si tienes dudas al respecto de lo anterior, podrías contactar a COFEPRIS para buscar la orientación pertinente, además por supuesto, de consultar algunos de los videos de EducaPRiS en el canal oficial de YouTube de esta autoridad sanitaria.
2. Elige al AESR adecuado para ti.
Para empezar, las personas compradoras deberían consultar con la autoridad sanitaria sobre aquellos AESR que se encuentren vigentes y debidamente autorizados para prestar los servicios correspondientes y posterior a ello, identificar a quiénes que se encuentren más cerca de su ubicación, tomando en consideración que en algunos casos, independientemente del precio de sus servicios, habría que pagar sus viáticos, en el entendido de que si bien, algunos AESR no se encuentran tan lejos de la ubicación de las personas compradoras, es posible que no se encuentren en la misma ciudad o Estado y ello puede representar que la inversión sea mayor o menor, considerando traslados, hospedaje o bien, los gastos correspondientes a los viáticos que sean aplicables y que pudiesen ser parte de los requisitos establecidos por los AESR en cuestión.
En relación a lo anterior, he de comentarte que cómo sucede con otros tantos tipos de profesionales, habrá AESR con mayor posicionamiento, reconocimiento y/o prestigio que otros, dada su experiencia, efectividad y proyectos / participaciones exitosas realizadas y/o concluidas a lo largo de su trayectoria, por tanto, si identificas a un AESR con estas características y este no se encuentra particularmente cerca de tu ubicación, en caso de ser de tu interés, valdría el esfuerzo que pongas sobre la balanza el precio de sus servicios y los viáticos que tendrías que cubrir, en contrapeso con la confianza y certeza que podría inspirarte tal AESR, tomando en consideración que un buen AESR podría ser un aliado muy valioso y que existiría la posibilidad de generar una relación de confianza y hasta cierto punto, duradera con alguien importante y efectivo en el medio.
La decisión está en tus manos, tómala con sabiduría y responsabilidad.
3. "Haz la tarea" antes de asesorarte y/o pedir orientación.
Cuando hablo de «hacer la tarea», para acabar pronto, hablo de que por tu cuenta e iniciativa propia te informes de manera adecuada y en la mayor medida posible, al respecto de aquellos pormenores relevantes en función de las compras y/o adquisiciones de equipos de imagenología, antes de solicitar asesorías y/o pedir orientación al respecto.
Puede sonar tedioso, complicado y en cierta medida abrumador, sobre todo al ser consciente que «hacer la tarea» no es lo único debes realizar en tu día a día, pero considero que vale la pena el esfuerzo, para qué, cuando busques y obtengas asesoría y/u orientación de las personas correctas, el proceso de compra sea más fluido, llevadero y justamente y para el caso, si bien no tendrías porqué ser experta(o) en todos y cada uno de los temas y pormenores relevantes relacionados con la compra y/o adquisición de un equipo de imagenología, gracias a haber «hecho la tarea», considero que te sería más sencillo, rápido y/o práctico identificar a aquellas(os) profesionales especialistas y/o expertas(os) que podrían asesorarte y/u orientarte adecuadamente, además de generar, desarrollar y preservar una relación de confianza con algunas de estas personas.
En adición a lo anterior, al «hacer la tarea» considero que tu capacidad de entendimiento y discernimiento al respecto de las compras y/o adquisiciones de equipos de imagenología podría ser mayor y por tu cuenta, podrías lidiar mucho mejor con algunas circunstancias, sintiéndote más empoderada(o) y con mayor autonomía, dando como posible resultado que las decisiones de compra que tomes sean mucho mejores que si no hubieses «hecho la tarea».
4. Sé plenamente consciente de tus condiciones, limitaciones y de tu rol como comprador.
Es elemental, pero estoy casi seguro que más de una persona compradora, no termina de ser consciente y entender debidamente a qué condiciones, limitaciones, situaciones y/o a que rol está sujeta en función de la compra / adquisición de equipos de imagenología, por tanto, considero prudente mencionarte que mientras mayor sea tu entendimiento y discernimiento al respecto, podrías tomar decisiones de compra más sabias y de manera responsable, ejemplo de ello, es el hecho de armar un presupuesto y de gestionarlo adecuadamente para tu caso en particular.
5. Asesórate con las personas correctas e intenta generar, desarrollar y preservar relaciones de confianza con las mismas.
Cómo te comenté antes, a consideración mía «hacer la tarea» es importante, aunque ello no tendría porqué implicar que seas experta(o) en todos y cada uno de los temas y pormenores relevantes relacionados con la compra y/o adquisición de un equipo de imagenología y justo por eso, es que asesorarse y/o obtener la orientación adecuada de las personas correctas es importante y en la práctica (a criterio mío), una necesidad.
Dicho lo anterior y dado que este artículo ya se ha extendido bastante, te invito a leer la parte anterior del tema del «ahorro en compras de equipos de imagenología», particularmente el punto «Asesorías y/o consultorías aplicables», el cuál puedes consultar dando clic aquí.
Cómo podrás haberte percatado, los puntos anteriores no son la revelación del siglo (ni pretenden serlo), de hecho, pueden parecer bastante obvios y lógicos, sin embargo y a consideración mía, no es hasta que les prestamos atención y empezamos a sumergirnos en la materia que podemos ser conscientes de ello, además de encontrarles sustancial sentido.
Me tomó mucho tiempo y he dedicado bastante esfuerzo y empeño en desarrollar aquello que quería comunicar con respecto al interesantísimo tema del «ahorro en compras de equipos de imagenología», para qué en la mayor medida posible, fuese contenido esclarecedor e interesante, no obstante debo reconocer que esto es solo una introducción a este tema o por decirlo de otra manera, es solo la punta del iceberg y evidentemente hay mucha más tela de la cuál cortar.
Dicho lo anterior, quiero agradecerte por acompañarme hasta esta instancia, agradezco que te tomarás el tiempo de leer tanto esta parte, como la anterior de este tema tan basto, si te gustó este artículo, por favor dale like y compártelo con otras personas a quiénes les pueda interesar, por ejemplo, vía LinkedIn.
Importante: Los ejemplos y el contenido de este artículo / publicación tienen la intención de ayudar a quién los lee y/o consulte, a conocer y/o entender mejor (hasta cierto punto y hasta cierta medida), los temas o aspectos correspondientes relacionados con tales ejemplos y/o contenido, por tanto, si requieres y/o te interesa aprender más al respecto de un tema u otro, te invitamos a que investigues y te cultives por tu cuenta, asimismo, los ejemplos, opiniones y/o contenidos que sean publicados, proporcionados y/o compartidos en los artículos del BLOG OFICIAL DE HAKEN IMAGENOLOGÍA (o bien “NUESTRO BLOG”), NO DEBEN ser considerados infalibles e inequívocos, además de que NO DEBEN ser considerados asesorías y/o consultorías especializadas, personalizadas o de cualquier otro tipo y/o sustituto o intento de las mismas, para el caso, si requieres asesoría, consultoría y/o acompañamiento en uno u otro ámbito, por favor consulta a profesionales debidamente capacitados y calificados para ello, de manera oportuna. En adición a lo anterior DEBES considerar que el contenido de este artículo está sujeto a cambios, modificaciones y/o actualizaciones sin previo aviso y sin necesidad de consentimiento alguno, además es responsabilidad exclusivamente de cada persona que lea y/o consulte los ejemplos, opiniones y/o contenidos que sean publicados, proporcionados y/o compartidos en los artículos del BLOG OFICIAL DE HAKEN IMAGENOLOGÍA (o bien “NUESTRO BLOG”) cualquier tipo de uso y/o consulta que haga de los mismos. Por último DEBES considerar que este artículo aborda contexto, aspectos y/o pormenores de las compras y/o adquisiciones de equipos de imagenología en México, por tanto, es posible que parte de su contenido no sea aplicable, ni adecuado para las compras y/o adquisiciones de equipos de imagenología en otros países. Gracias por tu comprensión.
Aquí finalizamos "¿Quieres ahorrar al comprar equipos de imagenología? - Parte 2".
Si te interesa leer más de nuestro contenido, consulta los artículos disponibles en “NUESTRO BLOG” o puedes suscribirte al NEWSLETTER DE HAKEN para recibir contenido de manera periódica, vía email.